Italia ha sumado una nueva pieza clave a su equipo técnico de balonmano. El anuncio oficial tuvo lugar hace unos días en la Unity Arena de Oslo, Noruega, durante el evento más importante del balonmano mundial. En la presentación ante los principales medios internacionales de este deporte, estuvo presente el presidente de la Federación Italiana de Balonmano (FIGH), Stefano Podini.

Con la llegada de Bob Hanning, se pone fin al ciclo deportivo liderado por el entrenador Riccardo Trillini, cuyo contrato está próximo a expirar. Trillini asumió el cargo en 2017 y condujo a la selección italiana a una histórica clasificación al Mundial de 2025. Bajo su dirección, Italia alcanzó la ronda principal del torneo y finalizó en la 16.ª posición, con un balance de tres victorias y tres derrotas.

Un proyecto estructurado para el futuro

Podini destacó que la incorporación de Hanning es parte de un plan de largo plazo iniciado tras las elecciones de junio pasado. “No se trata solo de una reestructuración administrativa, sino de un paso adelante en el desarrollo técnico del balonmano en pista y de playa, así como en las selecciones nacionales masculinas y femeninas, tanto en categorías absolutas como juveniles. La experiencia en el Mundial ha sido un hito para el futuro de nuestro deporte”, señaló.

Tras dos ciclos olímpicos bajo el liderazgo de Trillini, a quien expresó su profundo agradecimiento por su contribución en los últimos ocho años, Podini cree que ha llegado el momento de iniciar una nueva etapa. “Es fundamental mantener la continuidad técnica con el apoyo del entrenador Jürgen, pero también inyectar energía nueva, fijar metas aún más ambiciosas y mantener una alta exigencia competitiva”, explicó.

La experiencia de Hanning

Hanning ya había estado colaborando de manera informal con la Federación Italiana en los últimos meses, facilitando la llegada de jugadores italianos a los mejores clubes europeos. Gracias a estas gestiones, varios miembros de la selección competirán en la Bundesliga y otras ligas de primer nivel a partir del próximo año.

Con una amplia trayectoria en el balonmano, Hanning comenzó su carrera como entrenador a los 20 años en el TV Cronenberg. Posteriormente, se unió al TUSEM Essen como asistente técnico, donde trabajó junto a la leyenda alemana Heiner Brand. Además, dirigió equipos juveniles de Alemania y clubes como SG Solingen, HC Wuppertal, SG Willstätt/Schutterwald y HSV Hamburgo. En 2005, fue nombrado gerente general del Füchse Berlín, cargo que ocupó hasta 2021. Durante este período, también desempeñó funciones en la Federación Alemana y trabajó en el desarrollo de jóvenes talentos. Hasta el año pasado, entrenó al VfL Potsdam.

Un reto con grandes expectativas

“Estoy muy emocionado con esta nueva oportunidad y el desafío que tenemos por delante. Continuar el gran trabajo de Riccardo Trillini y del equipo será una tarea exigente, pero la asumo con total compromiso. Para seguir impulsando el balonmano italiano, federación, clubes y jugadores debemos trabajar juntos, cada uno aportando su esfuerzo”, afirmó Hanning durante su presentación en Noruega.

El nuevo técnico también destacó la importancia de la cooperación y la unidad. “Estos serán los pilares de nuestro éxito. Debemos aprovechar el entusiasmo y la dinámica actual para seguir haciendo crecer el balonmano italiano. Agradezco el apoyo de todos los que aman este deporte en Italia. Afrontemos juntos este desafío”, concluyó.

Próximo debut en la clasificación al Europeo 2026

Hanning debutará en el banquillo italiano en la fase de clasificación para el Campeonato de Europa de 2026. Su primer reto será en marzo, con un doble enfrentamiento ante Letonia en el Palasport Sa Rodia de Oristano. Italia parte con buenas opciones de avanzar a la fase final del torneo, respaldada por su victoria ante Serbia por 31-30 el pasado noviembre.