Independiente Del Valle y Deportes Tolima se citaban este miércoles para jugar por la segunda jornada de Copa Libertadores. Los ecuatorianos habían ganado con contundencia (2-0) en su primer partido frente a América Mineiro en Brasil, por lo que llegaban con la confianza por las nubes, y con la idea de derrotar al Tolima para empezar a sentenciar el grupo. Los “pijaos” por otra parte, habían perdido en el primer juego frente a Atlético Mineiro, y se veían en la obligación de ir a buscar un buen resultado como visitante.

El plan inicial de Hernán Torrés comenzaría a dar resultado sobre minuto 15′; Jeison Stiven Lucumí se inventaba una bonita jugada individual, y tras dejar a un rival sembrado en el césped, definía de gran manera ante el arquero Ramírez que nada podía hacer. Gol y celebración absoluta en el banco visitante que veía como se ponía por delante en el marcador. Hablando del plano individual, vale mencionar que Lucumí había anotado un par de tantos en el campeonato local, y ahora se estrenaba a nivel continental.

Deportes Tolima no se iba a conformar con el 1-0 e iría en busca de mucho más hacia el arco contrario; fue así como al minuto 40 conseguiría aumentar la ventaja gracias a un muy bonito gol de Anderson Plata. El extremo quedó mano a mano ante el guardameta local, y con mucha inteligencia decidió tirar el esférico por encima de su humanidad, la popular ‘vaselina’. El Estadio Banco Guayaquil quedaba en total silencio, y había mucho desconcierto por la gran diferencia que estaba sacando Tolima.

La segunda mitad iba a comenzar bastante movida, pues a los 52′ Junior Sornoza conseguía descontar después de un muy buen remate que salía esquinado; el portero Domínguez se estiraba con todo su esfuerzo, pero le era imposible alcanzar el esférico. Para colmo de males la escuadra tolimense tendría que defender el resto del partido con 10 jugadores, pues en los minutos finales José Moya vio la tarjeta roja tras una falta al borde del área.